Yo no sé de tareas simples
Tender la cama,
Doblar las medias,
Secar los platos.
No sé de verdades absolutas,
De besos de gusano,
De dioses que resucitan al tercer
día
Mientras hay hambre y enfermedad,
Y poco vino y menos pan.
Yo no sé de nada, mi amor.
Soy el desastre,
El manojo de cabellos secos y
nerviosos,
Los jeans sucios
Y la pasta dental seca en el
lavatorio.
Y tampoco sé de ser feliz,
Ni de ser esperanza que ilumina
Libro de autoayuda con aspiraciones
a best seller
O mensaje en una galleta de la
suerte.
Pero, si te pones difícil,
Puedo intentar ser, al menos, una gata
Que ronronea y eriza el lomo
Mientras pasea entre tus piernas.
Una gata que de tanto no entender
este mundo
Ha decidido armar su casa,
Su techo, su plato de comida,
En la esquina exacta donde
Termina tu cuerpo y empieza el mío.